José Artero

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El artista José Saborit Artero explora los límites de la pintura a través de obras que, aunque abstractas, contienen elementos que insinúan una representación realista. El uso del color en su trabajo crea una sensación enigmática ya que, a través de sucesivas capas de empastes y veladuras, la pintura parece nacer desde el propio lienzo y no desde el exterior.
Exposiciones colectivas
2018 - Exposición colectiva de los artistas seleccionados en el XX Premio de pintura de la Fundación Mainel, Galeria 9, Noviembre 2018.
2018 - XXXIII Concurso de pintura de Puzol, Octubre, 2018
2018 - Premio nacional de pintura Juan Francés, Xátiva, Agosto 2018.
2018 - XXI Premio nacional de pintura de la Fundación Mainel, 2018.
2018 - Exposición colectiva “Flores”. Galería Esther Montoriol. Barcelona. Abril-Junio, 2018.
2017 - Primer premio de pintura del XLVIII Salón de Otoño de pintura del Ateneo Mercantil de Valencia, Diciembre 2017.
2017 - Exposición colectiva de los artistas seleccionados en el XX Premio de pintura de la Fundación Mainel, Galeria 9, Noviembre, 2017.
2016 - XX Premio nacional de pintura de la Fundación Mainel, 2017 - XXXI Concurso de pintura de Puzol, 2016.
2016 - IX Premio Salou de Investigación Pictórica, 2016.
2016 - XXI edición del Premio de pintura de Algemesí, 2016
Premios y Becas
2017 - Primer premio de pintura del XLVIII Salón de Otoño de pintura del Ateneo Mercantil de Valencia, Diciembre 2017.
Colecciones
-Ateneo Mercantil de Valencia, 2017.
Biografía
José Saborit Martínez-Artero es licenciado en Ciencias Políticas y de la Administración por la Universidad de Valencia y Máster en Gestión Cultural por la UOC. Aunque empezó a pintar a los 21 años de edad, de forma casual, no fue hasta los 25 años cuando se dedicó de forma más profesional a la pintura.
Statement del Artista
Me interesa especialmente trabajar con la pintura al óleo, por su carácter matérico que permite jugar con la densidad y la fluidez del medio pictórico. Mediante el uso tradicional de sucesivas capas de empastes y veladuras, se crea una sensación enigmática de intriga donde la pintura parece que nazca de dentro del cuadro, y no desde el exterior, por encima.
La superposición de transparencias genera una percepción del color que se abre paso hasta nuestros ojos a través de las sutiles alteraciones cromáticas, con la energía inapelable de algo que aflora a la superficie desde la profundidad. Al mezclarse sobre la tela, las veladuras provocan contrastes y efectos cromáticos únicos que no podrían lograrse de otro modo, creando la aparición de nuevas dimensiones y profundidades visuales. De algún modo, el tiempo invertido en el proceso recompensa a la paciencia con un plus de intensidad.
Se crea así este juego visual, para reivindicar la propia esencia de la pintura ante las apariencias; haciendo que el espectador se sienta atraído por la lejanía aparente de los colores. La abstracción pictórica me permite reivindicar pues la belleza del color puro, asociado a la autenticidad, a la intimidad de las esencias, donde cobra una especial importancia el proceso pictórico, lento y pausado.
Las transiciones y las armonías de colores vivos, las atmósferas cromáticas armoniosas, generan en la percepción general una sensación de unidad, como si todas las tensiones y contrastes tuvieran, pese a sus divergencias, algo común y compartido. No hay formas definidas en su identidad individual sino evoluciones, transformaciones y diferencias tonales. El fundido unifica los colores afín de contagiar al espectador una alegría positiva que celebre la alegría de la visión y de la luz en estado puro, en pro de la belleza, sin más, sin apoyos conceptuales o figurativos. La pintura sólo puede ser entendida antes de la palabra, siempre sucede antes, en un momento anterior, no se puede interpretar con la lógica intelectual, sino con las emociones más primarias que nos afloren.
Decía Paul Cézanne, considerado como el padre de la pintura moderna, en su época de madurez pictórica, al final de su vida. “No existe ni la línea ni la delimitación de los volúmenes: sólo existen los contrastes. Y no contrastes de luces y sombras, sino contrastes proporcionados por las sensaciones cromáticas.”